INDEC recordó que, debido a los efectos negativos generados por la pandemia, solo un tercio de los locales del sector pudieron producir con normalidad.
En efecto,la industria automotriz y la del tabaco operaron al 0% de sus capacidades debido a que no estuvieron enmarcadas dentro de los rubros esenciales y no tuvieron actividad durante el período en cuestión.
Asimismo, la industria textil utilizó apenas el 4,2% de su capacidad instalada mientras que la metalmecánica, la de productos minerales no metálicos, la de productos metálicos básicos y la de caucho y plástico también exhibieron niveles por debajo de la media.
Paralelamente, el sector de refinación de petróleo, que suele tener un índice alto de aprovechamiento de sus recursos, funcionó al 46,2% de su potencial, lo cual reflejó una caída de casi 26 puntos respecto a abril de 2019, producto de la reducción en la circulación de vehículos automotores y la sustancial disminución en la cantidad de vuelos.
Por el contrario, sectores como el sustancias y productos químicos y el de alimentos, que fueron los menos afectados por la pandemia, presentaron indicadores similares a los del año anterior.
El declive observado en el funcionamiento del sector industrial se enmarca en un derrumbe interanual de la producción del 33,5% en abril, según lo informado la semana pasada por el INDEC.
La caída que más incidió en el nivel general fue la de Industrias metálicas básicas, afectada por la paralización en el rubro de la construcción, que cayó un 75,6%, y por la nula producción de autos. En el mismo sentido, la industria textil reflejó una contracción del 79,1%, explicada por el cese de la actividad comercial.
Para el cálculo de la utilización de la capacidad instalada, el instituto oficial de estadísticas públicas tiene en cuenta cuál es efectivamente la producción máxima que cada sector puede obtener a partir del aprovechamiento potencial de las plantas productivas, empleando el máximo de turnos posibles y las paradas necesarias para el mantenimiento apropiado de dicha capacidad.
Con el 39,7% de los locales funcionando parcialmente y el 27% sin ningún tipo de actividad, era previsible el desplome observado. Según la Encuesta Cualitativa de la Industria Manufacturera difundida por INDEC,más del 60% de los establecimientos industriales responsabilizó al aislamiento por no haber podido operar normalmente.