Una formación del tren Mitre descarriló esta mañana a unos 150 metros de la estación de Retiro sin provocar heridos ni contusos. La unidad llegaba a la plataforma desde Tigre.
El tren descalzó al ingresar a la estación pero iba a baja velocidad
Ocurrió esta mañana, a las 9.44, pero trascendió poco antes del mediodía. El último coche de la formación 3042 se descalzó y enseguida se realizó una evacuación controlada acorde con lo previsto por el protocolo, confirmaron a LA NACION desde Trenes Argentinos.
El ramal Retiro–Tigre del ferrocarril Mitre realiza un servicio corto hasta la estación de Núñez, a raíz de un descarrilamiento que no dejó heridos en una formación que ocurrió a las 9.45, informó Trenes Argentinos Operaciones.
Respecto de los servicios, los ramales Suárez y Bartolomé Mitre completan el recorrido hasta Retiro.
Se trata del segundo descarrilamiento en esa línea en poco más de un mes, ya que el 25 diciembre pasado una formación del mismo ramal también sufrió un inconveniente similar cerca de un paso a nivel del barrio porteño de Núñez, también sin mayores consecuencias humanas.
Este es el testimonio de uno de los pasajeros:
Martín viajaba en la formación y explicó al respecto: «El tren estaba entrando despacio y en un momento se quedó parado con todas las puertas cerradas y se apagó el aire. Con los minutos nos dimos cuenta de que había descarrilado en la parte posterior, un par de vagones. Habremos estado así veinte minutos».
El hombre, que se dirigía a su trabajo, contó que estaba en uno de los vagones de la mitad y que desde allí no percibió ningún tipo de impacto. «No se sintió ningún movimiento raro porque venía muy lento cuando se cortó la electricidad», dijo y aseguró que luego de pasado ese tiempo personal de la empresa los bajó del tren.
Martín explicó que en los vagones afectados, los dos últimos, hubo un poco de pánico cuando ocurrió el incidente: «En los vagones de atrás la gente empezó a gritar y a empujarse pero no pasó más. Tratamos de abrir las puertas con el sistema de seguridad pero no funcionó y adentro el calor era insoportable. Por suerte se abrió rápido».
Asimismo el pasajero aseguró que el tren iba lleno y que los empleados no los dejaron bajar inmediatamente porque las vías tienen electricidad y son peligrosas. «Nos fueron bajando de a uno y no nos dieron explicaciones de lo que pasaba», finalizó.