Finalizó la temporada de verano, y cuando se terminen de computarse las estadísticas climáticas, los números serán contundentes, indicando que gran parte de la Argentina atravesó el verano más caluroso jamás registrado.

Como si esto fuera poco, el cambio de mes se da en medio de un nuevo periodo de altas temperaturas, la novena ola de calor, que comenzó entre lunes y martes en el país afectando especialmente a la Patagonia norte, Cuyo y la región central.

Así las cosas, habrá que atravesar una primera quincena de marzo muy calurosa, en especial en esta primera semana sobre las provincias centrales como Buenos Aires, Córdoba y santa Fe, en donde se esperan las anomalías más destacadas.

En el día de ayer, el SMN, organismo oficial, emitió una alerta por temperaturas extremas en el nivel rojo, que significa que las cifras pronosticadas para hoy “pueden afectar a todas las personas, incluso a las saludables”.

El cielo de este viernes estará parcialmente nublado, lo que ofrecerá alguna cobertura del sol. Por otra parte, el organismo oficial no espera lluvias para hoy. En sus previsiones anticipadas, el Servicio Meteorológico Nacional evalúa chaparrones por la mañana y la tarde del sábado, lo que bajará un poco las temperaturas máximas.

Las proyecciones anticipadas para el sábado hablan de números algo por debajo de los esperados para hoy, con un piso de 24°C y un pico de 33°C, a alcanzarse en la madrugada y la tarde, respectivamente.

Algunas recomendaciones de salud para la ola de calor

Durante los días en los que rige el alerta por temperaturas extremas es importante tener en cuenta una serie de cuidados de salud, que fueron elaborados por el Ministerio de Salud y publicados por el Servicio Meteorológico Nacional. Estos están orientados a pasar de la mejor manera el calor que asolará la Ciudad de Buenos Aires y su conurbano.

• Aumentar el consumo de agua sin esperar a tener sed para mantener una hidratación adecuada.
• No exponerse al sol en exceso, ni en horas centrales del día (entre las 10 y las 16 horas).
• Prestar atención a los bebés, niños y niñas y a las personas mayores.
• Evitar las bebidas con cafeína, con alcohol o muy azucaradas.
• Evitar comidas muy abundantes.
• Ingerir verduras y frutas.
• Reducir la actividad física.
• Usar ropa ligera, holgada y de colores claros; sombrero, anteojos oscuros.
• Permanecer en espacios ventilados o acondicionados.
• Recordar que no existe un tratamiento farmacológico contra el golpe de calor y sólo los métodos clásicos, citados arriba, pueden prevenirlo y contrarrestarlo.
• Ante sed intensa y sequedad en la boca, temperatura mayor a 39º C, sudoración excesiva, sensación de calor sofocante, piel seca, agotamiento, mareos o desmayo, dolores de estómago, falta de apetito, náuseas o vómitos, dolores de cabeza, entre otros, se deberá actuar de la siguiente manera:
• Solicitar de inmediato asistencia médica.
• Trasladar a la persona afectada a la sombra, a un lugar fresco y tranquilo.
• Intentar refrescarla, mojarle la ropa y darle de beber agua fresca.