Llega el verano y con él las frutas y verduras de estación propias de estas temperaturas. Las frutas y verduras son parte esencial de la alimentación, aportan numerosos nutrientes con un reducido valor calórico, favoreciendo así, mantener un peso saludable.
Aunque existen recomendaciones claras y evidencias de las ventajas de su consumo en la salud, gran parte de la población no consume, como mínimo, las cinco raciones de vegetales al día que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS). Particularmente en la Argentina, según la 4ta Encuesta Nacional de Factores de Riesgo realizada en 2019 (ENFR 2019) el promedio diario de porciones de frutas o verduras consumidas fue de 2 por persona, y solo el 6% de la población cubre la recomendación de consumo establecida.
Entre los motivos del bajo consumo que encontró esta encuesta están que el 42,7% de las personas cree consumir la cantidad adecuada, el 36,6% mencionó motivos individuales como la falta de tiempo o de apoyo por parte del entorno así como los gustos y hábitos, entre otros, y alrededor del 20% mencionó factores económicos. Ante estas estadísticas que arrojan valores tan inferiores a los esperados en nuestro país, surge la necesidad de promover el consumo e incentivar la incorporación de frutas y verduras en la población general.
Las frutas y hortalizas se pueden clasificar según su color en 5 grupos: verde, amarillo-anaranjado, blanco, azul-violeta y rojo. El verano es una estación ideal para aprovechar todos los colores y los beneficios nutricionales que ofrecen. Aquellas frutas y hortalizas de color verde tienen muy pocas calorías y son ricas en vitamina A, B9, C, K y minerales como magnesio y potasio; las de color amarillo-naranja poseen carotenos que favorecen la formación de vitamina A y tienen efecto antioxidante; las blancas contienen compuestos azufrados (anticancerígenos), almidones y vitaminas del complejo B; las azules-violetas contienen antocianina que tiene efecto antioxidante y minerales como potasio, magnesio y vitaminas del complejo B; y las rojas son fuente de carotenoides, vitaminas A, C, y ácido fólico, entre otras vitaminas del complejo B y su color se debe a la presencia de un potente antioxidante, el licopeno.
Cada color tiene propiedades distintas, por lo tanto un alimento no sustituye a otro y deben combinarse durante el día.
Las variedades de verano disponibles en CABA y GBA de frutas son ananá, cereza, ciruela, damasco, durazno, melón, sandía, uva, pelón, higos. Las de verduras son berenjena, calabaza, morrón, pepino, tomate, zapallito verde, zapallo.
Algunas ideas para sumar frescura a tus platos pueden ser:
- Con frutas: frozen de yogur y cereza, licuados le leche y fruta, sorbete de fruta, brochette de ananá, melón y sandía, helados de procesados de frutas maduras, aguas saborizadas con trocitos de frutas, ensalada de frutas.
- Con verduras: berenjenas en escabeche, hummus con calabaza asada, pimientos rellenos con atún y arroz, sándwich integral de queso con pepino y tomate, tarta de zapallitos, tortilla fría con ensalada, gazpacho, milhojas de vegetales, ensalada rusa, arrollado primavera, ensaladas de vegetales y legumbres.